Nuevas Opciones para el Tratamiento del Xantelasma

Según la Dra. María Eugenia Buonsante Feighelstein, médica especialista en dermatología y estética, el xantelasma, aunque benigno, plantea desafíos únicos debido a la delgadez y sensibilidad de la piel periocular. En esta nota, la doctora comparte su visión sobre las soluciones avanzadas y las ventajas que ofrece la tecnología de plasma en la práctica clínica para tratar esta afección de forma segura y eficaz.

El xantelasma es una afección dermatológica benigna que se presenta como depósitos de colesterol alrededor de los párpados. Si bien no representa un riesgo grave para la salud, su visibilidad en el rostro suele hacer que los pacientes busquen opciones para reducir o eliminar estas lesiones, especialmente cuando afectan su autoestima y confianza. La zona periocular, además, presenta desafíos específicos: la piel es especialmente delgada y sensible, lo que puede aumentar el riesgo de cicatrices, alteraciones de pigmentación y complicaciones postoperatorias en tratamientos convencionales.

 

Durante años, la extirpación quirúrgica, el láser de CO2 y métodos como el peeling químico o la crioterapia han sido los más utilizados para tratar los xantelasmas. Cada uno de estos procedimientos tiene sus beneficios, aunque en ocasiones pueden conllevar riesgos de efectos secundarios, como cicatrices visibles, cambios en la pigmentación de la piel o períodos de recuperación prolongados. La necesidad de contar con una alternativa más precisa y menos invasiva ha llevado al desarrollo de tecnologías avanzadas, como la energía de plasma, que promete minimizar estos problemas.

 

 

La energía de plasma está revolucionando el enfoque de los tratamientos estéticos en zonas sensibles. Este método, basado en la sublimación controlada de las capas superficiales de la piel, evita la generación de calor profundo, lo que permite tratar el xantelasma sin afectar los tejidos circundantes y reducir el riesgo de cicatrices o hiperpigmentación. A diferencia de otros tratamientos que pueden requerir varios días de recuperación, la aplicación de plasma permite a los pacientes retomar sus actividades en un tiempo más corto, convirtiéndose en una opción atractiva para quienes buscan soluciones efectivas con menos impacto en su rutina diaria.

 

   

 

Los resultados observados en el tratamiento de xantelasmas con energía de plasma sugieren una baja tasa de recurrencia, lo que brinda a los pacientes una solución a largo plazo. Además, el procedimiento ha demostrado ser seguro y adecuado para distintos tipos de piel, lo que permite aplicar esta tecnología en una base de pacientes más amplia. Estas características han posicionado al plasma como una opción confiable para el abordaje del xantelasma, en especial en aquellos casos donde las lesiones son de tamaño pequeño o moderado.

 

 

 

 

La experiencia clínica indica que una adecuada selección del paciente es fundamental para obtener los mejores resultados con la tecnología de plasma. Los casos de xantelasmas más extensos o profundos pueden requerir un abordaje complementario o sesiones adicionales, mientras que es importante informar a los pacientes sobre la posibilidad de una ligera alteración de la pigmentación en la zona tratada, un efecto que suele ser temporal y se resuelve con el tiempo.

La tecnología de plasma se ha posicionado como un avance en el tratamiento de lesiones superficiales en zonas sensibles. Su precisión en áreas complejas y su corto tiempo de recuperación la consolidan como una opción valiosa en la medicina estética.

 

Para conocer más detalles sobre el funcionamiento de la tecnología de plasma, lea el artículo completo. Descarque el artículo de la Dra. María Eugenia Buonsante Feighelstein aqui.