Blefaroplastía no quirúrgica y sin bisturí: tecnología de plasma
La blefaroplastia es una operación mediante la cual se elimina el exceso de piel de los párpados superiores e inferiores (blefaroplastia superior e inferior) que permite corregir algunos defectos oculares que aumentan con el tiempo.
En el caso de la blefaroplastia quirúrgica, se realiza una incisión en la zona a tratar (previa anestesia local o general) y se retira el exceso de piel; luego, los dos colgajos del párpado se unen aplicando puntos de sutura. La cirugía se realiza generalmente en hospital de día.
Además del proceso de envejecimiento fisiológico que provoca estas imperfecciones existen otros factores. Los más comunes son: falta de descanso, alta exposición solar, deshidratación de la piel, tabaquismo, predisposición familiar, alimentación incorrecta.
El uso de la blefaroplastia ha crecido mucho en los últimos años. Paralelamente han surgido nuevas técnicas alternativas a los métodos clásicos. Al tratarse de una cirugía, con todo lo que conlleva en cuanto a invasividad y postoperatorio, muchas personas prefieren evitar acabar en el quirófano y optan por tratamientos no quirúrgicos de forma mínimamente invasiva y sin recurrir a la cirugía, con resultados efectivos y tiempos de recuperación reducidos en comparación con los métodos tradicionales.
Plexr® es el dispositivo médico con patente internacional y marca registrada producido por GMV, que introdujo el tratamiento de blefaroplastia no quirúrgica utilizando el mecanismo de acción del plasma en el campo de la medicina estética.
El éxito del dispositivo para la cirugía de blefaroplastia no quirúrgica se debe principalmente a los siguientes aspectos:
- Sin incisiones ni sangrado durante el tratamiento.
- Los tiempos de ejecución del procedimiento y la recuperación inmediatamente después del tratamiento en sí son rápidos en comparación con los métodos tradicionales.
- Sin puntos ni cicatrices.
- No se utiliza anestesia general: dependiendo de la sensibilidad del paciente, se puede aplicar una crema anestésica unos minutos antes de la operación.
- Es independiente del tipo de piel del paciente: por lo tanto se puede realizar en todos los fototipos.
Blefaroplastia quirúrgica (1) vs blefaroplastia no quirúrgica (2) realizada con Plexr®: comparación 7 días después de la cirugía
¿Cómo se realiza el procedimiento?
Después de desinfectar cuidadosamente la piel del paciente, el médico acerca la pieza de mano Plexr® a la zona a tratar y la activa, "dibujando" pequeños puntos o "manchas" sobre toda la región afectada por el tratamiento. El plasma generado por la pieza de mano nunca entra en contacto directo con la piel. Tiene una acción instantánea: las pequeñas "manchas" realizadas en la piel eliminan el exceso de tejido y generan un efecto de retracción elástica inmediata. Las molestias relacionadas con el tratamiento son mínimas, pero en caso de excesiva sensibilidad del paciente el médico puede aplicar una crema anestésica antes de la operación.
Después del procedimiento se formarán pequeñas costras que se caerán espontáneamente después de unos días. Otras contraindicaciones momentáneas son el edema y el enrojecimiento.
Los resultados de una blefaroplastia no quirúrgica realizada con Plexr® por médicos debidamente capacitados en el uso del dispositivo son generalmente excelentes y duraderos. La mirada de quienes se someten al tratamiento vuelve a adquirir un tono general más fresco y joven. Los resultados duran un promedio de 12 meses, aunque varían de un sujeto a otro, y el tratamiento puede repetirse.
Conozca Plexr®, el láser generador de plasma utilizado en Oftalmología para trabajar en la región periocular sin necesidad de protección del ojo.
Fuente: https://gruppogmv.com/blefaroplastica-non-chirurgica/