La monitorización hemodinámica es una herramienta de indudable valor para la evaluación de los pacientes críticos. Nos permite no solo detectar y determinar el origen de la inestabilidad hemodinámica, sino también guiar la elección del tratamiento más adecuado y evaluar con posterioridad su efectividad. Sin embargo, la monitorización per se no constituye una herramienta terapéutica y su empleo, sin un objetivo claramente definido, no tiene por qué afectar a la evolución de los pacientes.
Para que la monitorización hemodinámica redunde en beneficio para este debe ir necesariamente acoplada a un protocolo de tratamiento que efectivamente haya demostrado mejorar su pronóstico.
En consecuencia, la utilidad de los sistemas de monitorización no debería evaluarse tan solo por la exactitud y fiabilidad de sus medidas, sino también por la capacidad de afectar favorablemente a la evolución de los pacientes.(1)
La herramienta hemodinámica HemoSight, de los monitores de la familia BeneVision serie N, es un conjunto de herramientas asociados a parámetros principalmente hemodinámicos basadas en monitoreo del gasto cardíaco continio. Esta herramienta ayuda a diagnosticar y entender el estado del sistema cardiovascular, a fin de tratar oportunamente las patologías asociadas.
Conozca más sobre los monitores de la familia BeneVision serie N, de Mindray.
1. Gil Cano A, Monge García MI, Baigorri González F. Evidencia de la utilidad de la monitorización hemodinámica en el paciente crítico. Med Intensiva. diciembre de 2012;36(9):650-5.