La evolución de la cirugía hepática en los últimos tiempos ha permitido resecciones hepáticas más precisas y complejas para el tratamiento de diferentes patologías del hígado. El acercamiento a nuevas tecnologías y herramientas para la evaluación preoperatoria han mejorado enormemente la planificación quirúrgica.
La cirugía hepática en los últimos 50 años ha tenido un gran desarrollo en la evaluación preoperatoria y en las técnicas quirúrgicas para el tratamiento de las múltiples patologías del hígado. Recientes avances, como la técnica del uso de imagen con fluorescencia en laparoscopia, que utiliza el verde indocianina (ICG) en el reconocimiento intraoperatorio de lesiones hepáticas, permite realizar resecciones segmentarias más pequeñas y facilitar resecciones oncológicas.
El verde indocianina flourecente (ICG) es un colorante capaz de unirse a proteínas y emitir fluorescencia con un peak máximo a los 840 nm, bajo luz infrarroja.
Actualmente, además de en la expansión en la cirugía hepática, es utilizado en el mapeo hepático, colangiografía, visualización tumoral y evaluación de injertos en trasplante. En el 2008 aparecen los primeros reportes de uso del verde de indocianina en identificación de segmentos hepáticos y delimitación de neoplasias. Las características farmacocinéticas del verde de indocianina permiten su uso a través de punción biliar, venosa y portal. Facilita realizar colangiografía intraoperatoria con inyección in situ en vía biliar o unos minutos previos a la cirugía si es en forma endovenosa, permitiendo visualizar la vía biliar intra y extrahepática.
En la búsqueda de lograr resecciones anatómicas más precisas, el uso de la indocianina ha mostrado mejor identificación de los límites en los segmentos hepáticos que otras técnicas. En el área del trasplante hepático se ha utilizado para evaluar el flujo a través de las anastomosis vasculares y biliar, siendo un producto seguro y reproducible. Una complicación importante en el trasplante hepático es la disfunción primaria del injerto, en donde la medición de perfusión con VI ha mostrado directa correlación con el riesgo de disfunción, por lo que su utilización se ha expandido a diferentes áreas de la cirugía hepática.
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Fuente: https://www.scielo.cl/scielo.php?pid=S2452-45492022000300309&script=sci_arttext